La "cabronada" contra Marcelino Iglesias: no hay peor astilla que la del mismo palo
Descontrol o venganza. Esas son las dos hipótesis que se manejan en torno a la "elección" sorpresiva y espontánea del intendente de Guaymallén, Marcelino Iglesias, como integrante de la mesa escrutadora de la Vendimia, cargo que rechazó in límine. Lo mencionaron en el Acto Central y fue silbado.
El intendente de Guaymallén, Marcelino Iglesias, sufrió una silbatina luego de que las autoridades de Cultura lo incluyeran nada menos que en la mesa escrutadora de la elección de la Reina Nacional de la Vendimia. De inmediato, fue interpretado lisa y llanamente como "una cabronada" de la organización, habida cuenta de que se conoce la polémica en torno a su posición sobre la exposición de mujeres por su belleza y no por sus capacidades.
Se habló de "sorteo", pero nadie lo cree alrededor del intendente del departamento con mayor cantidad de votantes de Mendoza, que ha revalidado su posición en la última elección, en la que compitió con la lista de Vamos Mendocinos, pro soberanas vendimiales, que salió sexta.
Iglesias y Vicario en la fiesta de Guaymallén.
Al exponerlo ante el "monstruo" del Teatro Griego Frank Romero Day, "alguien cobró venganza", se escuchó decir o, al menos, "alguien no controla para nada lo que sucede en Cultura".
De inmediato, el senador demarchista Gabriel Pradines se burló en las redes de Iglesias: "Si fue espontáneo, vienen tiempos de cambio", tuiteó el hijo del exconcejal Roberto Pradines, que fuera legislador provincial y nacional del PD y candidato a intendente, a quien su vástago quiere imitar.
En Guaymallén aseguran que Iglesias rechazó en el mismo momento en que fue nominado a integrar la mesa escrutadora de una elección con la que, se sabe, está en desacuerdo.
En tanto, se anticipa un cruce de facturas por el hecho, que podría representar un tiro en el pie para el mismo partido que integra la ministra Vicario, a quien le empezarán a recordar, posiblemente, cómo increíblemente fracasó la temporada turística bajo su gestión a pesar de las condiciones económicas favorables.
