2023-2027: El descenso de Dante

El productor y empresario Andrés Vavrik toma prestado los argumentos del padre de la lengua italiana, Dante Alighieri, "La Divina Comedia, para describir la realidad argentina.

Andrés Vavrik

Tal como la visión del poeta florentino, Dante Alighieri, contada en su obra maestra "La divina comedia", donde él mismo como personaje principal, junto a su admirado maestro Virgilio, conocen el Infierno, también el Purgatorio y su amada Beatriz lo lleva por cada una de las esferas del Paraíso, el próximo presidente argentino durante 4 años transcurrirá por un camino similar.


Divina Comedia: El Infierno

Pero solo será un errante descenso a las tinieblas, que lo pondrá cara a cara con el mismísimo "maligno", de la misma manera que el autor lo hizo en su viaje al oscuro confín donde penan los más impuros espíritus. 

Difícilmente tenga la oportunidad en 4 años de conocer algo parecido al Purgatorio, mucho menos al Paraíso. Solo un iluso puede ver este periodo separado de una tormentosa transición, donde por lo menos dos buenos gobiernos deberán sucederlo para que un mandatario pueda ser acompañado por "Matilde" y "Beatriz" a ver la claridad y a oír arroyos de aguas claras.

La decadencia de la República Argentina, la imprevisibilidad, el desánimo, la inseguridad y lo traicionero de su funcionamiento la hacen comparable con la oscura selva plagada de fieras hambrientas donde Dante comienza su visión, podemos decir sin tapujos que el ciudadano Argentino siente lo mismo que sintió el, miedo, incertidumbre y desconfianza.

El próximo presidente se encontrará el 10 de diciembre en esa jungla, y al día siguiente en su primer día de gobierno al igual que Dante estará acechado por una pantera rugiente y un león león feroz, en este caso representados por la inflación y la pobreza extrema.

Inmediatamente nuestro primer mandatario, en ese desesperado cerrar de ojos esperando lo peor, necesitará ser tomado de la mano por "su Virgilio" en esta oportunidad representado en el ministro de economía. Al igual que el famoso poeta romano autor de Las Eneidas, este ministro deberá tomar de la mano a nuestro presidente, haciéndolo sentir seguro, deberá ir acompañándolo en el descenso a cada círculo de nuestro Infierno, enfrentando bestias, monstruos, vientos huracanados, torbellinos de fuego y sosteniéndolo cada vez que esta asquerosa realidad impacte de lleno en su ánimo y nublen de lágrimas sus ojos, por tanto dolor y peligro a su alrededor.

Inmediatamente, al comenzar el peligroso viaje, en el nuevo gobierno nuestros personajes deberán despojarse de toda cobardía.  

El Milei positivo, el Milei raro y Villarruel, una Cristina Kirchner en reversa y a toda velocidad

Allí, ni bien crucen el portal, se encontrarán con los perezosos, indolentes, esos que no se inclinaron nunca ni hacia el mal ni hacia el bien. Los tibios. Tal como Dante y Virgilio que entre todas las almas pudieron divisar al papa Celestino V, nuestro gobierno se encontrará con la burocracia estatal, improductiva, un bolsón enorme, que representa solo una porción del estado, pero a sabiendas de su inviabilidad han parasitado los presupuestos por décadas, y no tienen intenciones de abandonar ese vicio.

Así como el barquero Caronte paseaba sin destino a las almas por las aguas del Aqueronte, la política se ha aprovechado de esta clase estatal, poblando empresas públicas y organismos públicos. ¡Pobre de aquel que quiera tocar sus privilegios!

Dante describió al primer círculo como "El Limbo" un lugar no tan terrible, donde gente prestigiosa que no había sido bautizada suspiraba eternamente. En el limbo estaba el mismísimo Virgilio, pero también Dante pudo ver a los grandes filósofos Platón y Aristóteles, poetas como Homero y Horacio.

EL paralelismo con este nivel en la actualidad lo encontraran en el periodismo militante, los economistas que justifican lo injustificable, los filósofos que a cambio de dinero público describen una felicidad inexistente en el pueblo. Será tarea de quien conduzca cortar con esta mediocridad, que, aunque se encuentre dentro de las reglas del juego dañan enormemente al país.

En el segundo círculo el rey Minos examinaba los pecados de los lujuriosos. Un lugar donde el viento arrastraba a las almas de los "arrastrados" por las pasiones. Cleopatra, Helena de Troya estaban entre los espíritus de ese círculo.

En la batalla que darán nuestros personajes, se encontrarán con los Insaurralde de la vida, los Ishi y tantos otros corruptos que no se les mueve un pelo en mostrar cómo disfrutan el dinero de la corrupción en sus lujosas y lujuriosas vidas.

El tercer círculo que se narra la novela escrita en el siglo XIV es el reservado para los glotones. Allí estas almas de los insaciables eran castigadas hundidas en un barro hediondo, mojados por una pesada lluvia eterna y mordidos constantemente por Cerbero, un perro gigante de tres cabezas.

Podemos encontrar semejanzas si comparamos estos espíritus con la mafia sindical Argentina. Los gordos, un grupo de corruptos que por décadas se han servido de los trabajadores y desde voltear gobiernos hasta complicar todas las reformas tendientes a aumentar la productividad ha sido su función. Quien sea electo deberá enfrentarlos, y con la astucia de Dante rápidamente correrlos de la escena para seguir adelante con las reformas.  

El Purgatorio del Dante

El cuarto círculo infernal descripto por Dante en su descenso es el que alojaba a los avaros y pródigos. Allí estas almas eran castigadas arrastrando piedras de un lugar a otro eternamente. Quien se siente en el Sillón de Rivadavia se encontrará con un gran grupo de políticos de edad avanzada, muy poderosos, que desde el advenimiento de la democracia solo se han dedicado a permanecer. Poco tienen para aportar, pero la política partidaria deberá abandonar la obediencia y obligar a que esa casta deje el lugar a nuevos dirigentes, que con ideas nuevas y adaptados con otras herramientas sean el motor para el verdadero cambio.

EL maestro Virgilio llevó a Dante, según el mismo cuenta en su relato, hasta el quinto nivel del infierno. Allí cruzaron el río Estiguia, donde se ahogaban constantemente los iracundos, aquellos humanos que se habían dejado dominar por la cólera en sus vidas.

Cuando nuestro nuevo conductor se encamine a ordenar el país, se va a encontrar con la resistencia de las minorías violentas. Ya sea por temas medioambientales, de género, o derechos que ellos mismos llevan a su máxima expresión, estos grupos están dispuestos a romper y quemar todo lo que encuentren a su paso, con tal de que sus gritos sean tomados como verdad absoluta en la opinión pública.

Continuando con el viaje del florentino a las profundidades, llega el turno del sexto círculo de este oscuro cono que desciende hasta el centro de la tierra. Allí junto a su admirado poeta romano debieron lograr ingresar a la ciudad de Dite. Este sitio estaba reservado para los herejes, Medusa la custodiaba con su espantosa apariencia.

El sucesor del mediocre Alberto Fernández deberá tener muy claro que, si pretende subsistir, tiene que dominar a una banda de contratistas que solo han sabido facturarle al Estado, una industria proteccionista que jamás quiso competir con el mundo, vendedores de contenidos cuyos únicos clientes han sido gobiernos. Los "empresaurios" poderosos y vengativos que han sido los culpables en gran parte de nuestro espantoso presente.

Dante y Virgilio en su periplo siguieron sin dudarlo hasta el séptimo círculo, luego de subir una montaña y enfrentar al minotauro, ese horrendo ser híbrido entre toro y humano. Allí los violentos, sumergidos en un río de sangre hirviendo, eran castigados por sus pecados con flechas arrojadas por centauros. Asesinos, suicidas y blasfemos padecían eternamente estos ataques.

Este nivel es comparable con un tremendo escollo que tendrá que sortear el próximo gobierno, Las organizaciones sociales. Son pocas, pero muy poderosas, cuentan con el monopolio en la administración de los planes sociales, y con el poder de fuego que le dan estos miles de millones de pesos pueden poner en jaque a cualquier gestión. Los dueños de la calle, aprovechando la tibieza en seguridad y la dependencia de sus ejércitos dominados con dinero proveniente de nuestros impuestos, van a intentar que el statu quo predomine, y así como lo lograron en el gobierno de Macri con Carolina Stanley y en la actualidad con Victoria Tolosa Paz, estos mafiosos van a dar batalla.

Ya casi estamos llegando al final del viaje, pero nos toca analizar lo peor, y siguen las temibles semejanzas con la divina comedia. En este grandioso libro, el autor nos cuenta que el octavo círculo del infierno estaba habitado por los fraudulentos, los hipócritas. En las malebolges estos espíritus eran quemados en distintos pozos de fuego dependiendo de sus pecados.

Aunque la mano de su maestro Virgilio, y su sabiduría atenuaban el miedo que Dante sintió al ver lo desgarrador de este sitio, la tarea que enfrentará el próximo presidente cuando se ponga de cara a la corrupción sistémica no será menos difícil.

Argentina tiene los tres poderes del estado totalmente podridos en corrupción, variando según los niveles, la realidad es que habrá que desenmarañar un sistema, prácticamente tomado como una normalidad, pero es imposible que algo funcione bien en estas condiciones. Mucho coraje y respaldo será necesario para solucionar este flagelo.

Ahora sí, llegamos al noveno círculo. El más profundo, custodiado por gigantes. 

Dante y Virgilio en su tenebrosa vivencia llegaron al lago congelado, en cuyo centro el rey de las tinieblas, el mismísimo Lucifer se encargaba de castigar a los peores pecadores, los más despreciables, este lugar estaba reservado para los traidores. Considerada la traición el peor de los pecados, estos espíritus debían soportar los tres rostros y carcajadas del diablo en una pesada sombra fría. Allí el florentino y el poeta romano, pudieron ver dentro de una de las bocas del demonio, al peor pecador de todos los tiempos, el más odiado, Judas Iscariote.

Sea quien sea el que gane las elecciones y sea elegido nuestro presidente, deberá sortear al peor mal de la Argentina moderna, la impune Cristina Fernández de Kirchner. Si bien no se encuentra atrapada en el hielo, ni confinada en el centro de la tierra, su impunidad y su poder construido sobre masas ignorantes y violadas desde los más bajo de sus necesidades, será el enemigo a vencer. Ella no va a desistir, su maldad hará que busque imponerse en el futuro de la patria y conservar su indemnidad hasta el último de sus días.

Así como en el libro, Lucifer estaba rodeado de traidores asquerosos, nuestra realidad otra vez nos pone en una temible semejanza. Antes que nada, recordemos que nadie es kirchnerista gratis, y todos tenemos cerca a alguien que a cambio de unos pesos defiende a este ser nefasto.

La actual vicepresidenta ha sido el vehículo electoral para que el peronismo mantenga su hegemonía. Otra vez vemos candidatos usando su dolorosa popularidad para llegar al poder, dispuestos a medirse en una escala de traiciones, intentando mostrarse como sus amos y no como sus caniches gritones van a hacer todo lo posible para que los números les permitan seguir en el poder. Su ambición electoral no les permite ver que ese pacto cuasi diabólico es una condena asegurada a la horca. Ya lo intentó Alberto y somos testigos directos de su penoso presente y el lugar vergonzoso que ocupará en la historia de nuestro país.

Sería hermoso pensar que nada de esto va a pasar, que solo es una comparación oportunista, y que todo en la vida es color de rosas, como nos gusta pensar.

Sería mucho más fácil tirar frasecitas alentadoras, decir que los Argentinos podemos con todo y que el país es una maravilla fácilmente manejable por el que llegue a juntar más votos dentro de las urnas.

El viaje de Dante fue mucho más largo, tuvo una etapa intermedia en el purgatorio, donde con Virgilio pudieron entender muchas cosas y se encontraros con valiosos personajes de nuestra historia que no fueron valorados en sus tiempos.

Luego tuvo que separarse de su maestro, y esa tristeza fue rápidamente olvidada al ser tomado de la mano por su amada Beatriz, su amor imposible desde los 9 años, y que la muerte la había encontrado prematuramente a sus 20, antes que el poeta pudiera confesarle cuánto la había amado desde niño.

Seguramente nuestro país tendrá su recompensa, una etapa más parecida al paraíso de la novela, donde esferas luminosas, cantos de ángeles y ríos cristalinos nos reconforten, pero falta mucho, todavía estamos en la oscura selva de la confusión que describí al principio.

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