Las 3 razones por las que Argentina se está quedando sin computadoras

Con la restricción del acceso a dólares, a muchos se les hace imposible mantener la producción de computadoras. Advierten que escasean las notebooks de gama baja y media, al igual que las PC menos sofisticadas.

Miles de argentinos que buscan comprar una notebook en los últimos días han obtenido una idéntica respuesta en los locales comerciales, virtuales o físicos: no hay stock. Justamente, la producción en las fábricas de Tierra del Fuego está casi paralizada por una serie de razones que generan escasez de computadoras en Argentina.

Más allá de los protocolos anti covid-19 que comenzaron a implementarse el 20 de marzo y que afectaron la productividad, el golpe de gracia lo dieron las restricciones sobre el mercado cambiario, tendientes a evitar que se "fuguen" los dólares y, por efecto colateral, que ingresen insumos indispensables para la actividad.

Así lo planteó este jueves iProUP, en un informe en el que cita a ejecutivos de las principales fábricas de computadoras, y en donde resumen las causas de esta escasez de notebooks en tres razones:

1- Aumento del dólar, que generó un descalce entre oferta y demanda.

2- La mayor dificultad en la provisión de piezas necesarias para el ensamble, a partir de la imposibilidad de acceder al dólar oficial.

3- Las industrias se ven más imposibilitadas para operar en buenas condiciones.

"Andá a cualquier supermercado o cadena de electro: si conseguís una notebook de gama baja, te la pago yo", lanzó sugestivamente un ejecutivo de larga trayectoria en venta de equipos informáticos, cuya voz se escucha exhausta ante el dejavù de una situación que se repite tras cada crisis cambiaria. 

Concretamente, el menor acceso al dólar por parte de los importadores cortó el suministro de componentes.

También faltan PCs

Y además de las notebooks, también hay escasez de PC: las de gama baja, en su mayoría de industria nacional, no están en stock, y los precios de las del segmento medio se incrementaron hasta 30%. Aun así, resultan difíciles de conseguir.

Para las más PC más sofisticadas, las cotizaciones se duplicaron en apenas un mes y ninguna hoy baja de los $120.000.

"Estamos con el inventario casi en cero. No hay computadoras. Los fabricantes de pantallas y otros proveedores no nos están vendiendo", lamentan desde una fábrica, que agrega que al contexto local hay que agregar la explosión de la demanda de componentes a nivel global.

Por lo pronto, en el caso de las computadoras, habrá que esperar que el balance cambiario permita importar más insumos. Mientras, no queda otra que resignarse a comprar notebooks de altísima gama a precio blue o actualizar el equipo actual.

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